sábado, 19 de diciembre de 2015

El momento por el que nacimos


Hace un poquito menos de dos años, un  sábado por la mañana creo, andaba pegado a la Tablet viendo cómo se iba desarrollando aquel acto con el que daba el pistoletazo de salida oficial ese proyecto tan ilusionante, atrevido y regenerador que decidió llamarse Podemos. Allí estaba yo, como uno más de tantos de esos indignados/hastiados de los engaños del sistema, dejándome seducir, y leyendo, y opinando y aquel runrún de la palabra empoderar me llevó a tomar la iniciativa abriendo una simple página de Facebook por si, de algún modo u otro, acababa desembocando en uno de esos famosos círculos que nos vendían desde Madrid. Así que me tocó a mí, igual que podría haber sido cualquier otro, y enseguida descubrí que la llamada iba tocando cerebros y corazones que mandaban mensajitos a ese espacio virtual del Campo de Gibraltar. Y dejando pasar un tiempo prudencial nos reunimos, y poco a poco fuimos avanzando sin saber muy bien qué hacer, pero conociéndonos, formándonos y desbordados de ilusión. Tuvimos el acierto de llevar para adelante un acto de campaña y nos trajimos a Iñigo,a Pablito y a la más grande:nuestra Tere. Y llegó aquella noche del 25 de Mayo en la que se durmió tan poco. Y pasamos de ser invisibles a ser frikies, bolivarianos, terroristas y hasta iraníes.
En lo personal me llegó una propuesta de responsabilidad desde Madrid que me obligaba a dar un pequeño salto de esos que dan algo de vértigo. Las circunstancias obligaban a decir que sí y viví una experiencia que, a pesar de todos los pesares, me brindó el lujo de conocer a titanes de todo el estado, siendo el denominador común, en todos ellos, el compromiso, la responsabilidad, la sensibilidad ante las injusticias y una urgente necesidad de cambiar las cosas. Hoy muchos son cabezas de lista en sus comunidades autónomas, diputados, o presidentes mañana. Pero no todo fue un camino de rosas porque las cosas complejas resultan complejas, es lo que tiene, y las prisas obligadas no vienen a poner las cosas más fáciles. Así que no llovió a gusto de todos en Vistalegre, y muchos sentimos que perdimos parte de nuestra esencia. Desde dentro sentir que un tren descarrilaba y desde fuera ataques que crecían, se recrudecían e inoculaban el miedo en gran parte de la población. Momento perfecto para darle alas a otro partido que se venda como nuevo pero no nos den tanto miedo. Parece que todo nuestro fuelle se paró en seco…solo que cuando estás hecho de la ilusión de la gente normal dispuesta a cambiar las cosas las posibilidades de derrota se reducen a cero.
Siguió pasando el tiempo y en un 2015 frenético y bipolar, tomé la decisión de alejarme un par de filas para elegir familia, aunque tal cosa no significó nunca no estar. Este momento histórico con el que tanto hemos soñado tiene que ser y toca estar. Pasaron las municipales y llenamos con alcaldes de la dignidad las principales plazas, pero algunos desajustes veraniegos volvieron a sembrar dudas. No parecía que tuviésemos posibilidades reales. El PP se asentaba y vendía muy bien su discurso de la recuperación(al que lo quisiera comprar). Ciudadanos sin despeinarse seguía en ascenso meteórico lastrando el nuestro…
…parecía, parecía, parecía.
Parecía, pero todo el miedo sembrado, todas las dudas, todos los todos se disipan en la campaña cuando la gente vende ilusión. Ilusión real. El entusiasmo no se crea artificialmente y la bola de nieve que puso patas arriba el tablero político en aquel mayo del 2014, comenzó a crecer de nuevo hace dos semanas. Primero, tímidamente, más tarde descontroladamente y vuelvo a recibir mensajes de amigos que parecían tener claro que su voto iba para Rivera pero que ahora dudan, que me piden que trate de convencerlos.

No sé qué pasará mañana y, en el mejor de los escenarios posibles, esto no habría hecho más que empezar. Sin embargo, llevamos dos años de experiencias, de amistades, de disgustos también, de aprendizajes, de reflexiones, pero sobre todo de ilusiones. Porque mañana es el día para el que hemos nacido. Disfrutemos, es lo que toca

domingo, 13 de diciembre de 2015

Gracias Évole. Tú si que eres el cambio



Mientras veía esta noche Salvados volvía a decirme que le debo otra entrada a este coloso de la información. No sé si exactamente coloso de la información son las dos palabras que mejor lo pueden definir. En cualquier caso, sea como fuere, cualquier adjetivo de alabanza para con este hombre se me antoja que le queda pequeño.
¿Por qué? ¿Es acaso alabar a este hombre, una vez más, cosa de rojillos?
Pues mire ud., yo no lo creo. Jordi Évole un día comenzó la andadura por su cuenta de la misma forma en la que venía haciéndolo hasta ese momento, con el disfraz de cómico payasete tocapelotas, y la verdad es que era muy bueno en ello también...y en el camino, topándose, estrellándose con la realidad una y otra vez fue mutando porque, de algún modo, debió entender que la realidad no tenía ni puta gracia. Él que es de natural gracioso y muy irónico fue abandonando paulatinamente esta vieja mochila, lo hizo con estilo, de modo natural, como todo lo que hace. Porque si hay algo que quizás ha hecho de Évole esa persona que todo el mundo querría tener como colega es,precisamente, su naturalidad. Pero evidentemente no solo por eso podemos admirar, hasta tal punto, a una persona. Y en ese caso, sin duda, lo que más ha primado ha sido su valentía y su compromiso. Su valentía por no arrugarse frente a los grandes. Supongo que ninguno nos hemos tomado las molestias por tratar de imaginar los múltiples tipos de presiones a las que se ha tenido que ver sometido(y no me vengo a referir especialmente a presiones amenazadoras-que igual también-, sino a las del tipo: déjate de rollo y arrímate por aquí que te vas a enterar de lo que es vivir bien). Ha mantenido su humildad y naturalidad por bandera, con el único objetivo de ir radiografiando poquito a poco, programa tras programa, la realidad de este país y un poco también la de este mundo. Ha sido un profesor y hemos aprendido con él sobre un sinfin de cosas y nos hemos concienciado. No solo su compromiso ha sido diferenciador, atrevido, sino que también su estilo ha sido único, original, vanguardista. Es ese punto combinado con el gran gusto artístico que regala el equipo de Salvados al formato del programa, el que ha hecho de éste un referente histórico en mayúsculas. Sí, he dicho bien: REFERENTE HISTÓRICO. Lo que pasa es que ahora es demasiado pronto para poder valorarlo en su justa medida, pero a día de hoy, no cabe duda, y más con la que estamos liando entre todos, Salvados y, muy especialmente, Jordi Évole pasarán a la historia de este país. Grabados a fuego y bañado con pétalos de rosas y hasta coronas de laureles. 
Hablamos del 15M, de la aparición de Podemos, de los alcaldes del cambio, pero…¿qué cuota de responsabilidad ha tenido este señor en todo ello?

Gracias Jordi, gracias por tu compromiso diario, por tu sencillez, por tu entrega, por tu espíritu crítico y pedagógico. Gracias de verdad