sábado, 27 de abril de 2013

Estúpida conversación


¿Qué tal te encuentras hoy? — Le preguntó mientras garabateaba algunas notas ilegibles en el cuaderno.
Bien, supongo — Acertó a decir en un torpe intento de no parecer muy torpe.
Ya. Veo, sí.—La conversación comenzaba a girar en un extraño círculo cargado de una tensa estupidez. Lo peor de todo, es que no parecía haber forma de encontrar una salida viable y medianamente digna a aquel falso inicio de conversación. Mientras iba pensando en todo lo dicho, encontró la mejor manera de salir del paso. — Qué bien el tiempo, ¿no? Parece que ya no llueve. Ufff...menos mal.
Bueno, ejem, lo cierto es que está lloviendo.—Vaya, no me digas, pues no me he traído el paraguas. ¿Llueve mucho?
Pues, no sé, la verdad.
Cómo? Pero si me acabas de decir que está lloviendo, ¿cómo no vas a saber si llueve mucho?
Sí, llevas razón. Suena un tanto extraño. Pero lo cierto es que no he visto si está lloviendo o no. O sea, comprabarlo por mis propios ojos. Ni siquiera mediante el sentido del oído.
¿Querrás decir haberlo oído?
Bueno, ya. !Qué más da! Que no lo he sabido por las formas típicas de saberlo.
Entonces, te lo han dicho, supongo, ¿no?
No.
¿Qué dices? Es que te estás quedando conmigo, ¿ o qué?— Le preguntó el jefe con una extraña mueca que oscilaba entre la estupefacción y la ira.
No. No es eso. Es mi pierna— acabó soltando secamente. Es la pierna la que me dice si llueve o no.
No querrás decir que tu pierna habla, supongo, ¿verdad?—Bromeó aliviado el jefe tras la descarga de la tensión acumulada que el último comentario había desatado.
No, ya sabes que no. Quería decir que lo siento.
Yo también lo siento....jajajjaja— Se venía el jefe arriba, al que siempre se le tenía por un tipo muy gracioso, aunque estas gracias fuesen vistas por personas cuyo sentido del humor podría ser cuestionable por otras personas como por ejemplo el empleado, que ahora, en una extraña serena pose, mantenía esta conversación con él.
—¿Y qué es lo que sientes?—Volvió a cortar en seco el empleado, desconcertándolo de nuevo.
A ver, tan solo bromeaba. Tú querías decir “Lo siento” de sentir, y yo he aprovechado el juego de palabras para decir que yo también “lo siento” pero de sentirlo como por ti...Bah...Da igual. No tiene mucho sentido. Olvídalo.
Pero, —dijo el empleado transformando su rostro en un tormentoso rostro y apoyando amenazadoramente sus dos manos, de repente enormes, sobre la mesa de un jefe cada vez más pequeño —¿realmente crees que esta conversación tan estúpida puede olvidarse fácilmente?

jueves, 25 de abril de 2013

Espíritu del Ché



Sigue pasando la primavera, felices los pólenes se adhieren al epitelio de las mucosas respiratorias para que un disléxico sistema defensivo los confunda con guerreros del mal, y contra ellos ataca, causando sin querer, daño a quien pretendía, a priori, defender. Y servidor escribe estas líneas con sus ojos inyectados en sangre, la nariz goteando y un pequeño tesoro dormido sobre mi regazo padeciendo de una extraña enfermedad denominada la 6º enfermedad, que sin ser grave, también nos confundió a nosotros y mantuvo preocupados durante esta semana. El dolor de las dichosas ramas es un dolor que se refleja y reverbera con más fuerza en los troncos a los que sale...Y en esas, uno ve al escribir estas líneas símiles por todos lados.

El símil de, por ejemplo, atacar a quién no se debe, confundirlo con malvado guerrero causando daño a nosotros mismos. Este sistema inmune alérgico tiene su alterego en la sociedad, encarnado por todas aquellas personas que por un estado de confusión o ignorancia, creen la voz que vocifera “que viene el lobo” y temen que la estabilidad de nuestra querida España venga a quedar dinamitada por esos "bárbaros" que han hablado de asediar el Congreso...¿qué más da que haya realmente menos de mil personas en dicho “asedio” al tiempo que anuncian el mismo día que ya somos más de 6 millones de parados? Pensarán ellos, a los que tanta merma le hicieron a su capacidad de pensar, que la culpa de los parados es quizás de gente como ésa que malvadamente quieren acabar con la democracia y en el fondo son ellos los responsables. Porque vete tú a saber si por esa imagen que damos los grandes inversores  se van de aquí...Eso, eso, la marca espagña.

Por otro lado, el símil de ver padecer en tu hijo una enfermedad que le hace sufrir, que le duele...y sentir impotencia...¿Qué futuro le queda a este pueblo? ¿qué futuro a nuestros hijos? ¿Qué le queda a un pueblo que manda a sus personas cualificadas al extranjero después de haberse gastado un dineral en formarlos? ¿Qué le queda a una generación de jóvenes que se acerca al 60% de desempleo donde por otro lado la precariedad laboral y el coste de la vida no hacen más que aumentar? Aún serán mis palabras tachadas de demagógicas, de catastrofistas...¿A qué tendremos que esperar?

6 millones de parados fruto de políticas de austeridad ordenadas desde fuera y servicialmente cumplidas desde dentro. El poder político subyugado al capital. La policía subyugada al poder político también harán lo que estos les ordenen. Al igual que nuestros políticos cumplirán servilmente con la cadena de mando, al mismo tiempo que, desde la otra rama, el brazo propagandístico marcará la senda del pensamiento único: austeridad, vivir por encima de nuestras posibilidades, miedo al terrorismo y así escraches=terroristas...Miedo a los comunistas y así cualquier medida que les duela= comunista. Ya lo vio Orwell antes que ellos. Nunca pudimos pensar que la realidad llegara a superar la ficción, pero desde el ministerio de la Verdad nos dicen que la Guerra es la Paz la Libertad es la Esclavitud y la Ignorancia es la Fuerza. Demasiado triste para ser verdad, y uno, siempre quiere agarrarse a algo.

y finalmente, el símil de la primavera. Ese es el punto de apoyo al que queremos agarrarnos: el florecer, el resurgir, el despertar de la mano de un pueblo que poco a poco, quizás desesperadamente poco a poco, comienza a tomar conciencia y a saber señalar con el dedo dónde están los culpables. Y decide hacer escraches para que el político se sienta perseguido, o al menos presionado, o al menos responsable. Porque no podemos sentarnos y esperar a que su mala conciencia les diga que, tras estar sin dormir varios días, tienen que hacer las cosas mejor. Ellos, ya se ha dicho, son perros al servicio del capital y en este caso muerto el perro, tampoco se acaba la rabia. Porque al atacar al político no se ataca la raíz del problema, igual que el paracetamol por más que baje la fiebre no cura la infección. Pero en cualquier caso, lo tomamos. Siendo así, es un paso inevitable. Un primer paso. Nadie quiere la violencia pero todo el mundo la espera, y quizás, inconfesablemente, la deseen. Yo no sé lo que quiero. He tratado de meditar larga y tendidamente sobre este tema y no me atrevo a concluir. Si resultase práctica y estuviese bien dirigida, bienvenida sea. Pero mucho me temo que podría tornarse en nuestra contra por ser este juego el juego que ellos mejor dominan. Nos sacan años de distancia y casi todos los libros sobre este tema los escribieron ellos...

Aunque no todos

En estos tiempos de pan y circo y de goleadas alemanas en todos los sentidos, al madridismo se le antoja ocurrente hablar del espíritu de Juanito, clamando así por esas famosas remontadas que hicieran célebre a aquel Madrid...Pues si de solo fútbol se habla, permítaseme tomar esta analogía como referencia y hablar así del espíritu de uno grande de verdad. Clamar así por el espíritu del Ché

domingo, 14 de abril de 2013

Tricolor




Hoy hace 82 años que en toda España se izaba la tricolor. Se izaba la tricolor porque tras la dimisión de Primo de Rivera y la llamada a elecciones, el varapalo que se llevó la corona fue estrepitoso. El número de concejales republicanos triplicaba al de monárquicos en Madrid y los cuadruplicaba en Barcelona. A Alfonso XIII no le quedaba otra que salir del país, tal y como le advirtió Alcalá-Zamora pues si no la revuelta estaba asegurada. Es decir, el pueblo se hizo soberano a sí mismo. Para la posteridad quedará la carta que a nombre de Alfonso XIII publicara ABC:

Las elecciones celebradas el domingo me revelan claramente que no tengo hoy el amor de mi pueblo. Mi conciencia me dice que ese desvío no será definitivo, porque procuré siempre servir a España(...). Un Rey puede equivocarse, y sin duda erré yo alguna vez; pero sé bien que nuestra patria se mostró en todo tiempo generosa ante las culpas sin malicia (...)”

Muchos pensaréis que hoy, por el aniversario, no estaría nada mal ver una misiva de manos de nuestro actual monarca en términos parecidos...No debiéramos olvidar en ningún caso, los que así lo deseamos, que el origen de este exilio estuvo en la voluntad del pueblo.

82 años de una República que a pesar de sus avances en derechos sociales, o tal vez por estos, duró demasiado poco. A menudo a la gente le gusta vilipendiar lo que fuera este periodo legítimo y democrático de la historia más reciente de nuestro país. Es obvio que muchas cosas pudieron hacerse mal, sin embargo, fue una aspiración del pueblo para el pueblo, y en aquellos momentos en la Europa de la depresión y el auge del fascismo la España republicana suponía un ejemplo a seguir en materia de derechos sociales: sufragio universal para todos los ciudadanos mayores de 23 años, lucha por la Cultura y la Educación, intentos de reformas agrarias mediante decretos que entre otras cosas pretendían mejorar la relación patrón-jornalero, etc. Sin embargo, no todo lo que se planificó se llevó a la práctica como se hubiese deseado. Esto fue así porque los grupos de poder se sentían desposeídos de sus ancestrales privilegios e hicieron todo lo posible por boicotear las medidas llevadas a cabo. El clero, los terratenientes, la banca y los militares no permitirían el éxito de las medidas propuestas por los gobiernos de izquierda y acabarían sublevándose provocando aquella Guerra Civil, y ésta es la realidad, aunque muchos pretendan hacer creer que fue de otra forma.

La mayoría de la gente prefiere no hablar del tema cuando sale el tema de la república, la guerra o el franquismo, para ello suelen argumentar que: “ aquello está muerto y enterrado que a quién le importa y que el pasado, pasado está...” Por otro lado, está el otro argumento: “Los dos bandos hicieron cosas muy malas...” Estando así las cosas la gente parece olvidar que el gobierno de la Segunda era legítimo y democrático, que la guerra, acontecida por la sublevación de quienes no querían democracia, además de con los muertos, acabó con una dictadura que eximió de libertad a un pueblo hambriento durante 40 años. Estando así las cosas también parece olvidar la gente que tras esta dictadura, muerta de muerte natural, desembocaron sus turbulentas aguas en una monarquía elegida por el dictador, y eso ya no está tan lejos. Estando así las cosas, la gente parece olvidar que nuestro rey y toda su extensa familia vive de los impuestos de los ciudadanos que pagamos yates bribones, palacetes en Pedralbes y vacaciones en Baqueira, y eso aún queda más cerca... Estando así las cosas la gente parece no enterarse de que nuestro rey, su yerno, su hija y quién sabemos quién más, andan envueltos en casos de corrupción conocidos y muchos otros por conocer, y eso está aún más cerca. Estando así las cosas la gente prefiere seguir pensando que no pensar no es malo, y que lo perjudicial es lo contrario.

Muchos otros argumentan que una república no garantizaría lo del gasto que supondría para las arcas del Estado, y que igual tendríamos que pagar a un señor también corrupto...En cualquier caso, sería más fácil de atacar la corrupción de un presidente de la República que la de un monarca, tal y como está quedando demostrado, y además, en cualquier caso, no heredarían hijos, sobrinos y demás estirpe el cargo.

Otros muchos van más allá y aún se atreven a sacar brillo a la figura del rey agarrándose a aquel oscuro caso del intento fallido del golpe de Estado del 23-F; obviando que hay muchos puntos negros en aquella historia y obviando también que hay muchos historiadores que contemplan la posibilidad de que fuese Juan Carlos quién en última instancia estuviese detrás de aquel intento. Otros, o los mismos, también usan el argumento de que su campechanía, su precinto y su vitola lo convierten en el mejor de los embajadores para salpintar ese estúpido binomio lingüístico tan en auge en los últimos tiempos, la marca España. No creo que instituciones como WWF compartan esa opinión, ni tampoco la prensa seria del extranjero tras hacerse cargo de los innumerables casos de corruptela en los que la familia día sí día también se ve envuelto. Tampoco creo aquel “por qué no te callas?” que tanto le gustó aplaudir a nuestro pueblo, diera las señas de diplomacía y buen gusto que al perfecto embajador se le presupone.

En cualquier caso, lo que resulta evidente es que es el segundo aniversario consecutivo de aquella segunda República en el que los que creemos en ella sentimos estar más cerca de una Tercera. La suerte de correrías que inundan a la figura del monarca y otras piezas de primera valía dentro de la casa real, brindan grandes favores a los republicanos, haciéndonos sacar pecho e izando las banderas tal como ya ocurriera hace 82 años hoy. Por desgracia, y para no vender la piel del oso antes de cazarla, me atrevería a decir que acabar con la monarquía española se me antoja un episodio aún lejano, y eso que nunca estuvimos más cerca, porque sabiamente, tal y como caracteriza a los núcleos de poder, están traspasando el poder de la figura del padre al hijo, para garantizar una sucesión aséptica e indolora que acalle las voces que claman por la República. Mucho por hacer, pero en estos tiempos que corren de crisis, siglo XXI e incredulidad, ¿¿quién quiere creer en reyes??

jueves, 11 de abril de 2013

Faro guía


Con música de Jazz me dispongo a realizar el repaso semanal del noticiario. No es que sea amante de este tipo de entradas pero por una razón u otra, como varias veces ya se ha dicho en este blog, dada la realidad que empaña esta piel de toro llamada España, difícil es permanecer al margen, no escupir cuatro verdades, aunque solo sea con la intención de desahogarse; más que con la intención de tratar de abrir los ojos a nadie a estas alturas. Para eso ya estaba Sampedro y a los genios y a los sabios uno no osa compararse, tampoco lo pretende; más bien estos se convierten en fuente de inspiración, en acicate, en detonador para de alguna manera recoger el legado que dejaron y hacer su voluntad aquí en la tierra que no en el cielo; y ésta, su voluntad, la de Sampedro, que se nos fue, y otros gigantes que ya lo hicieron como el querido Saramago; no es otra que la de pensar. Poner en práctica, mejorar y fomentar el espíritu crítico. Si tanto presumimos de nuestra sapiencia que nos la colocamos en el nombre, qué menos que hacer gala de ella y no de lo que supone ser diametralmente opuesta: la memez, la estulticia, la ignorancia o la estupidez.

A música de Jazz Thelenious se la juega con Davis y el contrabajo se hace peleón a estas alturas, benditos técnicos de sonido y bendita tecnología que hoy nos regalan lo que fue un momento efímero en alguna noche de los 60 allá por calles neoyorquinas. Cuando algún alumno me pregunta si creo en dios antes rehusaba contestar, trataba de morderme la lengua, aunque nunca lo hice demasiado, cada día lo hago menos, el doctor me aconsejó que no es bueno tragarse la propia sangre, así que mi lengua sin yagas escupe que NO. Alguno, dándole vueltas a la imaginación se atreve a preguntar que en qué creo si no creo. Entonces contesto que en la tecnología y la ciencia. La tecnología y la ciencia por otro lado salen del ser humano. Ese sapiens y su sapiencia, por tanto, no está tan mal. Experto en lo mejor y lo peor nuestra especie se empeñó en pasar por aquí dejando huella. La tecnología nos dio la escritura, la rueda, la agricultura y algunos años después microscopios para que la ciencia descubriera el mundo oculto de lo microorganismos. También regaló ladrillos y la ciencia desarrolló y mejoró distintas estructuras para que los seres humanos tuviéramos techo donde dormir, porque la ciencia cuanto más descubría sobre salud más claro le quedaba que un techo donde guarecerse era sinónimo de salud. Ya que un organismo como la OMS, aunque algunas veces haya que cuestionarlo, define la salud como el estado de bienestar pleno y no solo la ausencia de enfermedad; resultaba evidente que que los seres humanos tuviéramos techos sería todo un avance. Así lo hicimos durante años. Hoy, también resulta que la ciencia y la tecnología mejoran cada día. Es la grandeza de la cultura. Sin embargo, lo de dormir bajo techo no parece correr la misma suerte y cada día más personas se ven expulsadas de sus hogares, aunque en lugar de eso lo llamen desahucios. Pero creo que esto se debe a cosas que tienen más que ver con la economía que con la ciencia y la tecnología, tal vez hay humanos sapiens y humanos no sapiens, aunque la ciencia aún no lo haya descubierto.

Para que la gente no sea expulsada de sus techos mucha gente ha empezado a darle vueltas al coco, en homenaje a nuestro nombre, y algunos han tenido la idea de que presionar a los causantes de las expulsiones pudiera ayudar. Otros, han decidido ponerle un nombre (los sapiens siempre ponemos nombre a todas las cosas): escraches. Otros (no sapiens) han dicho que eso está muy mal porque tiene que ver con lo que otros no sapiens hicieron en el pasado: Nazis con las estrellas y los stalinistas en Siberia y el Ku Klux Klan con sus hogueras, en fin que Ada Colau, la sapiens representante de los escraches, debe medir tres metros y lanzar fuego por la boca. Pero algunos, que igual pues tampoco somos sapiens, pensamos que si se quejan mucho de los escraches es porque estos les hacen daño...Les mina. Viene a dar donde duele, y esto, piensa un servidor, es justo lo que este pueblo, en camino más o menos inconsciente de alcanzar el poder, necesita. Así que vengan escraches, por favor. Que si un señor dice que arrancará cabezas a perro flautas escracheadores mande dos escraches allá por favor. Entre tanto, con lo parsimonioso que resultan para otras cosas, ya han dado 300 metros de distancia a los escracheadores. Estos recovecos de la (in)justicia que se nos escapa al ciudadano de a pie nos deja cara de no sapiens.

Por otro lado, a estas alturas es difícil confiar en un partido de los grandes, más si lleva las siglas del PSOE, así que considerando la capa de escepticismo que han sembrado en nuestro ingenuidad cualquier medida que suene a “buena para el pueblo”, tendrá que ser automáticamente puesta en cuarentena, pero, por más cuarentena que tenga que pasar habrá que informarse. A eso, sin duda, nos ayudan nuestros medios de comunicación, en especial los que pertenecen a la derecha mediática. Ayudan de tal forma que viendo la cólera que ha desatado dicha medida en tales medios nos permite sondear al alza lo buena que ésta pudiera ser. Dime de qué te enfadas y diré cómo joderte...parece un lema ideal para estos señores poderosos que de alguna manera quien sabe si hoy no, quizás, empiezan a escachearse...que diga, escacharrarse. Se recoge el chiringuito señores, y a lo lejos, tres siglos a lo lejos, se ve brillar con fuerza el resplandeciente filo de las guillotinas de la revolución francesa...

Querido José Luis, allá donde tu cuerpo calcinado haya ascendido, una mirada de complicidad se alza contigo. Querido José Luis, bien sabía ud. que “hemos recibido una vida, así que vamos a vivirla”. Esta noche el faro guía de la lucidez brilla más fuerte. Echándote unos vinos con Saramago o con Carrillo, tal vez veríais que no pintaba tan mal la cosa. El camino es largo y tortuoso, como dijera Mccartney, pero hay que recorrerlo. Gracias por tu Lucidez.

lunes, 8 de abril de 2013

Adiós Lady Margaret



Hoy, Damas y caballeros, ha muerto la mamá del neoliberalismo...
Aferrada a las doctrinas de Milton Friedman, Lady Tatcher gobernó, como dicen, con puño de hierro...pero, ¿qué quiere decir eso de gobernar con puño de hierro? Bien, lo cierto es que no soy inglés, ni tampoco había nacido cuando entró la señorita al 10 de Downing Street, pero está la historia, y la contrahistoria, las cosas que se escriben y los documentales que se ven. Parece que una de las grandes inventoras, y si no inventoras, simpatizantes con la causa; o impulsora, de estas medidas “estructurales” ,tan de moda en nuestros días, fue esta señora que hoy se despide. Como hablar mal de los muertos queda feo, y más cuando están humeantes, preferirá la prensa hablar bien de ellos, que da mucho más juego, es más políticamente correcto y en fin quién le va a reprochar a ella lo que hizo...Bahh...pero, ¿qué hizo?
La señorita Tatcher, acodándose a la perfección con Reagan al otro lado del Atlántico, fue pionera, junto con el actor, en llevar a cabo las medidas que allá por los 70 el economista Friedman trató de llevar a la práctica en EEUU pero que otros presidentes, un pelín más sesudos, tuvieron la sensatez (o el miedo) de no llevarlas a cabo. Pero esta chica no. Arrasó con las medidas Neocon. Privatizó todo lo privatizable y le quitó al Estado toda capacidad de decisión. El mundo al servicio de las grandes multinacionales...y desde entonces hasta ahora aquellos primeros ladrillos se transformaron bajo su mandato en sólidos cimientos que tras la caída del telón de acero y los años venideros terminarían por forjar este hermoso y tambaleante edificio burbujeante que tantas veces parece estar rozando el descalabro.

La Thatcher entró a principios de los 80, y sus medidas pasaban por recortar el gasto público, bajar impuestos, reducir empresas estatales y desregular la industria. El paro creció tanto durante el primer año de su mandato que su popularidad cayó bajo mínimos. Todo parecía indicar que su carrera sería corta, pero como por arte de magia(llamémoslo así) ocurrió justo lo que su entredicha popularidad necesitaba: La inigualable vieja fórmula del éxito para con tus conciudadanos. una Guerra. Así, con su discurso solemne, se dirigió a su pueblo para hacerles saber que los argentinos habían invadido unas islas que practicamente ningún inglés conocía, algo así como lo de Perejil pero solo un pelín menos ridículo. Claro, ella, a diferencia de nuestro Trillo y nuestro Ansar, mandó buques y esas cosas a cruzar el Atlántico. Tres meses después la guerra concluyó y los victoriosos militares fueron recibidos cual selección triunfante con su copa del mundo. La multitud estalló en júbilo bajo las consignas patrióticas regalándole a la Dama todo un camino libre para darles por culo.
Las medidas de Libre Mercado de Friedman, que hasta entonces solo se habían llevado a cabo en Chile y Argentina con los regímenes dictatoriales de Pinochet y Videla, a esas alturas de la historia con el comunismo vivito y coleando de la mano de una moribunda URRS, eran demasiado caústicas como para ser aceptadas por la población. Por eso ni siquiera Nixon se había atrevido a hacerlo. Pero ahora el panorama había cambiado, con Reagan y Thatcher jugando a lo mismo, con el lavado de cerebro del patriotismo bélico y con la crisis económica, todas las excusas eran buenas. Reyes de la publicidad y el marketing, eran conocedores de que cualquier objeto puntiagudo, duro, grande y punzante entraría bajo cualquier orificio si se conseguía vender de la forma adecuada. Y así lo hicieron. Bajo el nombre del progreso para el Reino Unido, Margaret Thatcher vendió las compañías nacionales del Acero, del Agua , de la Electricidad, del Gas, del Teléfono, las Aerolíneas, y el Petróleo. Para solo algún año después privatizar también las Viviendas públicas, los Servicios Municipales, los financieros y finalmente la Banca. Crecieron las protestas, estalló la violencia. Los mineros protagonizaron una huelga que tendría paralizado el centro de Londres por un buen espacio de tiempo. La huelga duró un año, pero la Dama ya se había metido tanto en el papel de mujer fatal que no iba a retroceder. Y no lo hizo.

Antes de la llegada de Thatcher un gerente de una empresa ganaba 10 veces más que un empleado medio. En 2007 ganaba 100 veces más.

Las consecuencias de aquellas políticas son reflejadas hoy día en la manera en que nos conducen a esas llamadas “medidas estructurales” consistentes en BAJAR EL GASTO PÚBLICO, PRIVATIZAR, AJUSTARSE AL DÉFICIT y ese largo etc. que tan maniatados, hartos y desesperados nos tienen...

A veces para entender las causas de las cosas hay que ir hasta más atrás de ZP, de Aznar e incluso más allá de nuestras fronteras...

Señorita Thatcher, la verdad es que no sé si será enterrada o incinerada, poco me importa, no caeré en la ordinariez, estupidez o bajeza de desearle ningún mal, al fin y al cabo ya no tiene sentido. Puestos a desear hubiera deseado que no hubiese gobernado, pero tampoco nada se puede hacer ya con respecto a eso. Lo único que tiene sentido desear es que la historia la ponga en su sitio, para de este modo, tratar de no repetirla.

miércoles, 3 de abril de 2013

Kalashnikov




Llevo algún tiempo tratando de no entrar al trapo en asuntos de política. No es por nada, es que a veces uno se satura y el enfado efervesce tanto que la sangre ebulle y sube a la cabeza, y ésta, sin remedio, entra en ceguera. Una ceguera de rabia que difícilmente se subsana. Siendo casi imposible pensar con lucidez en tal estado, a los pensamientos desencadenados se les pasa la imagen recurrente de una kalashnikov, de sangre, de violencia, de gente que pague, y claro uno que siempre quiso considerarse pacifista entra en tal estado de paradoja que concluye que tal vez será mejor mirar para otro lado y de este modo bajar el burbujeo de la sangre, recuperar la visión, saludar de nuevo al pensamiento “coherente” y alejarse de posturas radicales tan poco aconsejables. Por esto, y no por otra cosa, uno tiene que alejarse de las noticias. Pero a veces las noticias, y los hechos diarios, parecen ponerse de acuerdo para volver a agitar las neuronas, evitar que la vista mire a otro lado, volver a elevar la temperatura sanguínea y hacer que el ciclo comience de nuevo...y por esta razón de nuevo escribo, tal vez con la esperanza de que mis letras encolerezidas suplanten la visión de las metralletas.

El señor presidente del Gobierno lo ha vuelto a hacer, parecía imposible pero lo ha vuelto a hacer. Transformándose en el Gran Hermano se presenta de nuevo ante los periodistas para decir qué sé yo tras una pantalla de plasma y evitar después preguntas, aunque esto ya lo hacía cuando se presentaba sin la pantalla. Tal vez pensará Mariano que su estúpida cara de lerdo al sentirse menos presionada será menos dada a hacer ese continuo de mohines que tanto desprestigio suman a su desprestigio. Con mohines o sin ellos seguirá pareciendo oligofrénico profundo, pero la rabia que me genera pensar que en este país que tan democrático se considera, que tanto vocifera contra los regímenes de otros países acusándolos de faltos de libertad, el presidente para cuando aparece lo hace bajo esta estampa, es tal que difícil definición le encuentro.

El que sí ha dado la cara ha sido Núñez Feijoo, el presidente de Galicia, ha dado la cara para mentir como un bellaco al decir que sí, que conocía al narco, pero que no sabía de sus actividades delictivas. Él, que entonces era alto dirigente de la Xunta, parece que debía ser el único que no lo conocía por esos lares, porque al parecer, según afirman las innumerables personas entrevistadas, el capo del contrabando de tabaco y después de otros drogas mayores era archifamoso por las rías ya desde los 80...pero él no. Nuñez Feijoo se codeaba con él, salía en barco, compartía una amistad de tres años, PERO NO SABÍA A QUÉ SE DEDICABA!!!

Mientras tanto una relativa buena noticia, y es que la infanta se ha mostrado intocable, al menos de momento, quién puede pensar a estas alturas que pagará el pato, ella, o el otro, o alguno de tantos que ahora están imputados. Pero uno necesita agarrarse a una mentira, pensar que tal vez sí, que tal vez esta vez, quién sabe...De momento está imputada, y eso, en cualquier caso, habrá que celebrarlo y felicitar y agradecer que aparezca un Juez que, como aquel otro que tan mal acabó, parece regirse con independencia, o al menos eso nos hace pensar, porque a estas alturas, quién pone la mano en el fuego por ninguno de estos de las altas esferas. En cualquier caso, agarrándonos al Juez Castro como a un clavo ardiendo, queriendo creer que hay salvadores.

Con todo, va y descubro que no es que haya un programa más absurdo, estúpido y sinsentido en primetime y con máximas audiencias en el que, en esta ocasión, una vez más pseudofamosos son protagonistas tirándose a la piscina...Tirarse a la piscina, bonita metáfora para estos tiempos...Va y descubro, como iba diciendo, que no hay uno, sino dos. Dos programas calcados en distintas cadenas, con distintos presentadores (eso sí los de siempre: Jesusito y Arturito) con sendos jurados (eso sí los de siempre: Torrentito y Borisito), y los mismos concursantes que en total suman las mismas neuronas que pueden tener todas las amebas que floten en el agua de esa puta piscina, porque ante el horrendo de la idea, a uno ya se le antoja hasta que es el mismo plató. Demasiado kafkiano, demasiado triste para ser verdad y demasiado deprimente para pensar que este puto país tenga arreglo...

Perdón por la tristeza, pero el arma rusa una vez más vuelve a invadir mi cabeza

lunes, 1 de abril de 2013

Ese Mundini




A menudo criticamos las redes sociales como facebook. Con la seriedad del que pretende ser solemne aducimos todo lo que se ha perdido con la falta de realidad en el trato humano y vamos concatenando un sinfín de blas, blas, blas...hasta que, por pura inercia, nuestro espíritu existencialista se aborrece de sí mismo y decide callar. Es frecuente oírnos blandir esta espada, sin embargo, en una hipócrita paradoja apenas argumentamos las bondades que regalan estos medios, porque como las meigas, haberlas haylas. Así pues, heme aquí a punto de, por una vez y sin que sirva de precedente, halagar al maldito mundo cibernético que nos ve envejecer criando celulitis y cardiopatías varias. A saber:

Hace casi dos añitos ya, en una soporífera noche de aburrimiento eterno me hallé buceando por blogs ajenos, tal vez por algún amigo que prestó un enlace en dicha red, y como sin querer lo encontré. Aquel viejo conocido, compañero de instituto, admirado por sus dotes baloncestísticas. La vida por las circunstancias inherentes a la misma puso tierra y tiempo de por medio entre su persona y la mía, pero no tan alejadas debían estar las fuentes de las que bebieron nuestras almas porque al paso de los años supo y pudo la convergencia hacer caso a la coherencia y volver a establecer un contacto que tal vez antes nunca llegó a tal cosa. Admirado por su verso, me salió la vena creativa a la guitarra en tiempos en los que la sequía compositora me mantenía drenado. Llovió, casi diluvió, pero siempre le faltó a un servidor un talento innato para tales menesteres. Así iba recogiendo del árbol del paraíso versos de primera para músicas de tercera. No pasaba nada, a él, que nunca quiso tocar a bombo y platillo, no le importaba, hasta le ilusionaba. No era yo Drexler, o Ruibal, pero claro, algo es algo, supondría la figura. Pasó el tiempo, y su gordo y engordado cuchitril seguía alimentándose de versos ondecasílabos que tejían sonetos...

Las vueltas del destino, y las personas en el camino que actúan como trampolines dieron hace pocos meses con nuestro amigo el poeta regalándole alas nuevas por estrenar a su autoestima. De esta guisa, y con una replanificación familiar a la vuelta de la esquina, nuestro mago de las rimas decidió que era hora de dar forma a ese trozo del ciberespacio, reducirlo a libro y sacarlo de paseo, para de ese modo, poder concluir con las tres metas que se nos presuponen en la vida: Yo planté un árbol con él, es un padre modelo de difícil alcance y ahora, regala a todo amante de lo bueno, más de 100 sonetos para enriquecer las estanterías (yo lo tengo entre Hernández y Machado).

Consultas externas, de venta en las farmacias de la palabra, prologado por el genuino Tito Muñoz, autor de letras tan estratosféricas como “De cuando estuve loco” (JM Serrat) y el que ha protagonizado junto con al autor del libro maravillosos “sonetos a pachas” en los últimos meses, de disfrute gratuito, una ventaja más, a través de los muros del facebook. Por otro lado, a su presentación fue el gran Téllez de maestro de ceremonias. Una de esas personas que tiene el impagable mérito de hacer que los acomplejados algecireños saquemos pecho hablando de nuestra tierra si usamos su nombre o el de Paco...Pronto será para una mayoría el de Stewart Mundini uno más de esos nombres que se sumen a esa escueta lista.

Las Consultas Externas de Stewart Mundini pudiera ser el primer libro de un poeta que estudien nuestros hijos en el futuro, pero como eso es mucho decir en estos tiempos que corren lo que nadie negará, y menos que nadie su autor, es que supone el quite de una espina que sabe a gloria. Tenga guardadas o no grandes lunas el futuro para Stewart, ya nunca podrá dejar de decir eso de: “Que me quiten lo bailao”.

Alegre, gustoso, encantado de poder llamar amigo al autor del libro, creo que será de justicia adjuntar algún soneto, no vaya a pensar el malintencionado pensamiento del lector de esta entrada que la amistad reconocida me ciega y no son gigantes esos versos, sino tan solo molinos de viento. Aceptando ese margen de la duda, es de recibo brindar un par de sonetos, y tal vez de ese modo contribuir a animaros a dar un poco de glamour a vuestras estanterías.


Más cerca que al principio
Con esto de la edad, que no perdona
y avanza sigilosa e impasible,
se aprende a comprender lo incomprensible
y a subsanar la rabia que se encona.

Más cerca que al principio del final
y con el ecuador ya superado,
fui de extremadamente moderado
a moderadamente radical.

Ya me cansé de andar buscando excusas,
ya basta de apartarme las pelusas
para arrojar balones al abismo.

La vida pasará y esa factura
la pagaré con aires de locura,
y, luego ya, que arrase el cataclismo


Perdona esta disculpa

Perdona esta disculpa va, como siempre, tarde
conoces mi tendencia a no mirar atrás,
ya sabes que si cuelgo el traje de cobarde
beso por donde pisas y voy por donde vas.

Las flores que envié te produces alergia,
se perdió en el correo la carta que escribí,
tu tú puesto en mi yo: misteriosa sinergia
leve como el zumbido de un débil colibrí.

Perdona la escenita de la paja en tu ojo
la viga de mi ojo no me dejaba ver,
cuando caigo en la cuenta de mi error me recojo

y recojo las migas de la cena de ayer.
Perdona esta disculpa, descorre los cerrojos
va, como siempre tarde, abre, va a amanecer.