Aún recuerdo con perfecta claridad como mi amigo del alma Chemi, me preguntó un día que pululaba envuelto en el hastío de un día cualquiera si había visto Baraka. No. Le contesté yo. Y me dijo, pues a vamos a verla compañero.
Es sin duda una película que debe saber verse. Es una película a la que le tenemos que dedicar, para nuestro propio beneficio, una abstracción absoluta(o al menos en la medida de lo posible) del mundanal ruido, en todas sus formas, de esta civilización de ciudad de piedra. Pues Baraka es la vida. De hecho la palabra viene del árabe, y signica algo así como "bendición de vida", o "aliento de vida", y eso es lo que de un modo admirable, según lo viví yo, consigue transmitir.
Película?? Muchos dicen que es un documental. Realmente da igual, es irrelevante. Lo que verdaderamente importa es lo que ves, lo que oyes, lo que puedes sentir, de ahí la importancia de abstraerte y dejarte embaucar por la obra.
No hay guiones, no hay palabras, no hay actores. Es la vida en sí misma. Diferentes prismas, diferentes realidades conocidas(tal vez en ese sentido podemos decir documental). Pero sin embargo, tiene una trama, una idea que su director(Ron Fricke) trata de hacer llegar al espectador.Una presentación. Una denuncia. Una esperanza. Otro forma de entender la vida, lejana a nuestro perspectiva consumidora y acelerada.
La obra es de 1992, si no recuerdo mal, y sus imágenes y su banda sonora son sin lugar a dudas, sublimes.
No debería poner ninguna imagen de Baraka, sencillamente tendrías que creerme y ponerte a verla, para así no saber por donde van los tiros, pero es demasiada tentadora la idea de poner un par de escenas como para desecharla.
La gran putada es que al parecer está descatalogada, y realmente merece la pena ser vista en buena calidad de imagen y sonido. En cualquier caso, tú ya decides.
De modo semejante a lo que decía en la anterior entrada respecto a Shine On You de Pink Floyd, si te relajas, te reclinas en el sofá, te dejas llevar, estás solo, ves Baraka y no sientes nada...dedícate al parchís...
El mundo es inmenso, lleno de historia, historias, rituales, parajes naturales, dramas y misterio. El mundo es el lugar más bello que jamás hubiésemos imaginado. Hay vida más allá de nuestros muros.
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